lunes, 6 de octubre de 2014

Mitos caídos y retos para 2014 y 2015


Congreso de los Diputados
Durante estos meses, se han caído varios mitos de la historia más contemporánea de España. El rey ha abdicado, el Partido Socialista está intentando renovarse, Cataluña está a un paso de la independencia, las instituciones pierden legitimidad…Se caen cosas que han perdurado durante casi 40 años de democracia. Se abre un nuevo reto y las costuras del país, en vez de descoserse y arreglarse, van a reventar.

La situación política no tiene horizonte. La economía va muy pero que muy lentamente recuperándose. La sociedad está aborregada y los ciudadanos no vemos el futuro con gran entusiasmo. España, si hubiera que describirla con un color, sería el gris. El gris de una mañana de niebla con lluvia cuando no se ve más allá de un metro si estás en el coche o andando con el paraguas. A lo mejor es una calma triste que precede a la tempestad, la cual puede llegar desde Cataluña con unas elecciones o una declaración unilateral de independencia; o desde Podemos, en unas elecciones municipales o generales donde arrasen y sean la llave para gobernar, o incluso, gobiernen.

Parlamento Catalán
Los mitos de los que se hablaba al principio se han caído por el desgaste de un sistema que en sus mejores tiempos no supo arreglar algunas lagunas que dejó la Transición. Esto no quiere decir que la Transición se hiciera mal, sino que no dejó cerradas cuestiones como la categoría de territorios como Cataluña o Euskadi o las competencias de las diferentes administraciones. Son lagunas bastante grandes que han provocado fangos que ahora hay que solucionar.


Los próximos meses serán cruciales. El final de 2014 y todo el 2015 va a ser un tiempo puramente político. Cataluña, elecciones municipales en mayo, generales en noviembre y no se sabe si se va a colar alguna autonómica van a copar las noticias y las charlas de los ciudadanos. Y no nos podemos quedar mirando el asunto desde lejos. Somos seres políticos. No podemos obviar algo de lo que somos parte. La participación de la ciudadanía debe ser esencial en todos estos momentos para construir un país nuevo, con numerosas oportunidades y la mejora de la convivencia de todos.

Juan Manuel Luna Cruz